martes, 10 de noviembre de 2009

07/11/09

No ha pasado ni dos días y ya estás perdiendo tu tiempo.

Dices que no tienes tiempo para mí, que tienes que modificar tu agenda porque está demasiado llena.
Dices que los días que vienen serán más difíciles y que no podrás verme.
Dices que el 15 de noviembre tienes un show y que te estás preparando para ello.
Dices que tienes que estudiar porque tienes que levantar tus notas en el colegio.
Dices que tienes que acudir a la iglesia ésta tarde y que no sabes a qué hora saldrás, y pretendes que te llame a la noche para vernos un rato, como si yo fuera tu perro faldero.
Dices que tu tiempo es limitado y sin embargo duermes hasta el mediodía, ocupándote justo en el momento en que yo te llamo.
Dices que nuestra relación no anda bien, y sí, es verdad, no anda bien, pero es porque nosotros lo queremos así.
Dices que has aprobado aquel examen que era muy importante para ti.
Dices que tu mamá te está llamando y con esa excusa me colgaste el teléfono, y por más que haya escuchado su voz y sepa que es cierto lo que me dijiste, prefiero hacerme el sordo.
Dices que me extrañas, pero evitas verme prefiriendo dormir hasta el mediodía o irte a bailar a tus show’s.
Dices (o dirás al leer esto) que no te comprendo, y que hago mucho alboroto por tan mínimos problemas.
Dices que decir te quiero es más juvenil que decir te amo, y qué importa el sentido que tenga, lo que importa es decirlo de corazón, y tú no me lo dices desde hace mucho tiempo.
Dices que estás feliz y debido a eso no puedo decirte todo lo que ahora escribo, simplemente porque no quiero arruinar tu felicidad.
Dices que soy un flojo por no haber asistido a clase una semana, pero no sabes que no fui a clase porque necesitaba un momento de soledad para estar contigo (cosa que nunca sucedió), además, quise un momento para pensar que hacía de mi vida, quise estar solo para poder leer aquellos libros de amor que tanto me fascinan, quise estar solo para poder escribir como ahora lo hago.
Dices (o dirás) que soy un tarado por deprimirme muy rápido.
Dices que hago preguntas inesperadas, pero no imaginas que gracias a esas preguntas sé todo lo que ahora escribo.
Dices (porque yo te lo dije) que un sueño nuestro es envejecer juntos y caminar de la mano por estas calles limeñas, (yo me pregunto) ¿Si ahora mismo no estamos juntos, cómo pretendes que estemos juntos con los años?

1 comentarios:

Shin dijo...

Nadie te dice esto, pero te lo digo yo, que soy el menos indicado y si digo algo, no tengo nada que perder, pues nuestra amistad esta agonizante y ninguno le dice nada al otro. Te digo que las cosas son como las tienes, y las tienes asi por que es lo que has elegido.

Dejame decirte, tomandome atribuciones que no meresco, que todo lo que dices suena lindo, pero nada de lo que haces tiene coherencia. Dices tambien que buscas la felicidad, pero no estas dispuesto a deshacer un espectro de felicidad ajena para lograr lo que quieres. Te has encadenado y amordazado con tus propios ideales, sin darte cuenta que la realidad es otra.

Y te lo digo, por que no decir nada seria cobardia, cuando yo pase o paso, por la misma mania autodestructiva. Ahora dime, señor poeta ¿Que tienes tu para decirte a ti mismo?

Publicar un comentario